La revolución del transporte eléctrico y su futuro

 

Hay dos sectores concretos capaces de transformar completamente el panorama de las ciudades del futuro: la energía y los transportes.

En su artículo These 3 elements are crucial to the future of electric cars de Francesco Starace, CEO and General Manager de Enel Group, junto a Jean-Pascal Tricoire, Chairman and CEO de Schneider Electric, se centra en estos dos aspectos y en su intersección: la movilidad eléctrica.

Dentro del sistema energético ya estamos asistiendo a profundas transformaciones. Las más evidentes son la transición hacia fuentes limpias y las técnicas de almacenamiento, es decir, de acumulación de electricidad, además, estas innovaciones nos permiten electrificar cada vez más, es decir, pasar a la alimentación eléctrica en muchos ámbitos, empezando por el transporte.

Según el último informe de la entidad investigadora Bloomberg New Energy Finance (BNEF), los vehículos eléctricos están encaminados a dominar las ventas globales de autos de pasajeros y autobuses para el año 2040, y disminuye significativamente el mercado de camionetas y camiones de corta distancia.

Por primera vez, BNEF ha incorporado en su pronóstico información detallada sobre el mercado de vehículos comerciales. Estas proyecciones muestran que los modelos eléctricos tomarán un 56% de las ventas de vehículos comerciales ligeros en Europa, Estados Unidos y China dentro de las próximas dos décadas, además del 31% del mercado comercial mediano.

Los camiones pesados probarán ser el segmento más difícil de penetrar para el mercado de vehículos eléctricos, con ventas limitadas al 19% en 2040. Su uso práctico será mayormente para aplicaciones de distancia corta.

Sin embargo, los camiones pesados convencionales de largas distancias también enfrentarán otra competencia, no de vehículos eléctricos, sino de alternativas que usan gas natural y células de combustible de hidrógeno.

La función de los servicios de movilidad compartida, tales como transportación por pedido (conocido en inglés como ride-hailing), serán importantes en este panorama cambiante.

Estos servicios representan menos del 5% de todas las millas viajadas por pasajeros a nivel mundial en el momento, pero es probable que aumente un 19% en 2040. El equipo BNEF no espera que los vehículos autónomos tengan un impacto sobre el transporte global y los patrones de energía hasta la década del 2030.

El principal impulsor para la tendencia de electrificación durante los próximos 20 años será más reducciones dramáticas en los costos de las baterías de VE, lo que hará que los autos eléctricos sean más económicos que las alternativas con motores de combustión interna (ICE por sus siglas en inglés) para mediados o a finales de los 2020 en casi todos los mercados, igualmente tanto por los costos de por vida como los iniciales.

Desde 2010 el costo promedio de las baterías de ion-litio por kilovatio-hora ha caído en un 85% por una combinación de la economía de escala en la manufactura y las mejoras tecnológicas. Sin embargo, durante el Nordic EV Summit 2019, el Dr. Ralf Speth, CEO de Jaguar Land Rover, ha comentado que “tenemos una gran demanda, pero estamos limitados por la provisión de baterías. Toda la industria de coches eléctricos tiene este problema y se mantendrá así durante dos o tres años”.

Una postura compartida por Ulrich Eichhorn, Director de I+D del Grupo Volkswagen, que en 2017 aseguraba que “la industria necesitará añadir una capacidad de producción de baterías equivalente a 40 Gigafactorías de Tesla”, algo que según las previsiones del propio fabricante no se alcanzará hasta 2025.

Así también el informe de BNEF estima que China seguirá liderando en cuanto a los autos eléctricos, representando el 48% de todos los VE de pasajeros vendidos en 2025 y el 26% en 2040, en tanto los demás mercados se ponen al día.

Europa liderará como el mercado número dos de VE a nivel mundial durante la década de 2020. La electrificación en los mercados emergentes, no de China, será mucho más lenta, lo que llevará a la fragmentación del mercado global de autos.